Es cierto, este año peló y bastante. Fueron unos cuantitos los días en que unos diarios bien doblados acompañaron a los motocas y en los colectivos se podía palpar el “dulce aroma”, no exactamente de “naranjo en flor” sino más bien del hace tres días no me baño porque ro’y koko. Pero, todo esto no fue suficiente para “persuadir” a los Diputados de darle un “me gusta” a la idea de mantener el horario de verano todo el año.
La idea es que, cuando se adelante la hora en octubre, ya no se toque más. Para eso, solo basta que el Ejecutivo dé su “ok” y comenzará a regir de manera oficial.
¿De qué sirve esto? Si bien es cierto que los amaneceres serán más tardíos, lo que hará que muchos chicos vayan a “oscuras” a dar clases, también es cierto que oscurecerá más tarde, cosa que dé tiempo a quienes van al cole en el turno tarde a llegar a sus casas con luz natural.
Lo mismo para quienes trabajan desde muy temprano hasta un poco más allá de las 5 de la tarde
