Nuestra Realidad Noticias

“Dormíamos en un colchón sobre el suelo”

Tenía una infección y le echaron por querer ir al doctor.

Con un colchón en el suelo y bichos alrededor, Juana Rotela, su pequeña de 3 años y su marido tuvieron que vivir por 4 meses mientras trabajaban en una estancia ubicada en Agua Dulce, Alto Paraguay, antes de ser despedida.

Según contó, solo tenían una pieza y todas sus cosas estaban en el suelo.

“Cuando llegamos ni siquiera había energía eléctrica”, resaltó.

El trato era tan inhumano que cuando Rotela pidió permiso al encargado, Jacinto Ledesma para salir de la estancia por una complicación de apéndice, no le dieron el permiso, a pesar de que hasta orinaba sangre.

Como estaba cada vez más grave, y por miedo a que su vida estuviera en peligro, esa misma semana Juana volvió a pedir el permiso para ir al doctor, el cual le correspondía, ya que el trato era que tendría retiro cada 3 meses.

El jueves pasado, sin darle muchas explicaciones, le dijeron que ya no iba a trabajar en la estancia.

Le querían joder

Le entregaron un documento de liquidación por G. 2.700.000, en el que figuraba que supuestamente ella cobraba sueldo mínimo, sin embargo, ella solo percibía G. 1.300.000 mensual.

Luego de firmar, le volvieron a entregar un documento similar, pero con los montos correctos, donde figuraba que en realidad ella debía cobrar G. 4 millones en liquidación, por lo que se negó a firmar el segundo documento.

Al preguntarle por qué la habían despedido, el comisario respondió que era por ser “pastelosa” y por estar molestando al gerente con sus pedidos de permiso. Ahora, Juana quiere accionar legalmente para que le paguen lo que le deben por despido injustificado y asegura que este tipo de injusticia es muy común en las zonas rurales.

Los dejaron en medio de la nada

Como pudieron, juntaron sus cosas en bolsones y fueron llevados hasta el costado de un camino en el que ni siquiera pasaban colectivos. Tuvieron que pasar la noche lluviosa en la calle, bajo el precario techo de un puesto que encontraron allí.

Al mediodía del viernes, gracias a la ayuda de un chofer que pasaba por allí, pudieron llegar hasta Filadelfia, donde tomaron un bus que les permitió regresar a Concepción.

#DIARIOEXTRA

error: Conteúdo Protegido/Contenido protegido