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El fiscal Leonardo Cáceres confirmó la imputación para el capataz de un establecimiento rural por la desaparición de más de 500 cabezas de ganado. Al mismo tiempo solicitó para su prisión preventiva.
Marcos da Silva Souza, brasileño de 50 años, fue imputado por la supuesta comisión del hecho punible de abigeato y lesión de confianza. El mismo se desempeña como funcionario de la estancia Lagunita S. A.
“Hemos determinado de acuerdo a los documentos que hay un faltante considerable de animales vacunos, de aproximadamente 500 cabezas de ganado vacuno”, dijo Cáceres.
El representante del Ministerio Público agregó que dialogaron con Marcos quien no supo argumentar sobre la desaparición de los animales vacunos, por lo que se procedió su detención. Aún queda determinar a co autores y cómplices.
“Alegó que hubo mucha mortandad en estos tiempos, pero tampoco había comunicado a los directivos de la empresa”, añadió.
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