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Con 50 asesinatos por encargo que le atribuyen, el ultimado jefe de sicarios Marcio Sánchez, probablemente ya tenga sucesor, cuya identidad real aún no se confirmó, aunque sí su alias: “Polaco”. Este fue, según investigadores, el destinatario de la amenaza que dio Sánchez.
Un audio en el que se escucha a alias Aguacate, dirigiéndose a uno que le disputaba su liderazgo en el criminal negocio del sicariato, dio importantes pistas a la Policía.
Una de ellas es la que menciona de un alias “Polaco”, como el destinatario del mensaje de voz que lanzó “Aguacate”, días antes de ser asesinado presuntamente por parte de su propia guardia y primer anillo de confianza.
“Yo soy el malandro, ustedes son unos novatos. Recién después de morirme, ustedes se van a reunir para elegir al nuevo jefe. Dejen de hacer alusiones hacia mí, porque les puedo enviar cien hombres y de eso no se van a salvar.. Ni Dios les va a salvar si se meten conmigo“, señala la advertencia del extinto jefe de sicarios.
Consultado al respecto, el comisario Luis López, jefe del departamento contra el Crimen Organizado de la Policía Nacional, respondió que están relevando datos para desvelar la identidad de la persona a quien se refería el mensaje de “Aguacate”.
Al ser abordado sobre el tal “Polaco”, López declinó dar, de momento, detalles de lo que se tiene en torno al presunto nuevo líder del grupo de sicarios que opera en la frontera paraguayo-brasileña. No obstante apuntó que existe convicción entre investigadores, de que el jefe de sicarios fue asesinado por sus propios guardias, conminados con uno de los que hace poco dejó el grupo y armó su propio equipo.
“No tenemos absolutamente duda de que el hecho se haya producido por personas de su entera confianza. También ellos pelean por el poder. Allí no existen parientes, amigos, soldados y custodios. Este señor fallecido consiguió el poder a través de esos hechos”, declaró López.